¿Alguna vez un weon te a meado como ofensa?...
lo mire desgarrando, pensé en lanzarle la brea que tenia en la garganta, pero me detuve.
Lo mire y volví a la taza de té.
tras el muro de mi apatía se dibujo el sonido de la tasa en el aire y de las suelas de Alex abofeteando el suelo hacia la cocina
así te ves... como si un weon te hubiese meado en la cara y tu le hubieses respondido "gracias señor".
Cuando alguien es asertivo hasta ese punto lo mínimo que le queda al orgullo es ser franco
- si - murmure - estoy meado por dentro-
lastima que si imaginaste a ese alguien, ser franco no es requerimiento.
La presencia invisible me pena a veces, estaba solo en el departamento hace una semana, hace tres días que no salía, y este era mi segundo día con las cortinas abajo.
A fin de cuentas no es ahí precisamente donde vivo, las cosas que me hacen vivir esta un poco mas arriba o mas a bajo... no puedo vivir en lo concreto.
Así de simple
renegado a un mundo muy poco concreto, mi relación con la realidad no es más que un lío de cadenas... y a mi solo me interesa el brillo del eslabón.
Difícil es que alguien lo entienda así, no estoy consagrado a sus dioses pero hablo con un par de ellos mientras la micro me lleva en círculos cortos sobre el mismo mundo a ningún lugar. Lo importante no es viajar, lo importante es el viaje.
Inútil, el cuestionamiento sigue siendo con abogados de acá... y no de allá.
Estoy meado por dentro, puede que al terminar el té ya no lo este...
todo depende lo que pase allá arriba... o allá abajo.